Cuando vives en una urbanización, los veranos son completamente diferentes al invierno. Se convive más y mejor. En invierno, con el trabajo y el mal tiempo, casi no ves a los vecinos. En verano es diferente. Son días de compartir piscina, porche y barbacoa.
Nosotros hemos conseguido un grupito de vecinos bastante "apañao" con los que nos ponemos de acuerdo en un santiamén para montar un sarao. No nos falta la cenita de los viernes en el pueblo, la comida (que se suele extender hasta la cena) para aprovechar la piscina, las merendolas, algún que otro cumpleaños,...
En tu casa o en la mía, eso es lo de menos. Lo importante es estar a gusto juntos y disfrutar de las recién adquiridas amistades. Y que duren...
4 Comments:
Qué bien os lo pasais...
Yo me llevo bien con mis vecinos, pero nos vemos sólo el ratillo de pisci, luego ya cada uno para su casa con sus "quehaceres".
Un beso.
Bueno, mejor así, ¿verdad?...sin malos rollitos ni nada de eso. Qué envidia da usted, oiga.
Un fuerte beso.
No ha sido siempre así, por desgracia. Ha costado encontrar la gente adecuada. Por eso digo que dojalá dure...
Que duren las amistades.
Es una suerte tener buenos vecinos.
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